Dios permitió que pudiéramos hacer un viaje a Desaguadero (frontera entre Perú y Bolivia) para ser testigos de una pareja joven de la iglesia bautista “Alfa y Omega”. Conocí la iglesia en desaguadero por medio del pastor Asencio H. Sarmiento en el mes de febrero y tuve el privilegio de predicar en un culto dominical. El pastor Asencio es un ex alumno del seminario del Cusco, quien junto a su esposa Lucha están sirviendo al Señor en esta zona del Perú. En esa oportunidad conocí al hermano Fredy y su compañera y gracias a Dios ellos decidieron seguir a Dios tomando el paso del santo matrimonio en obediencia a su Palabra.
Para mí fue una nueva experiencia presenciar una boda. Los novios salen del local de la iglesia acompañados por sus testigos y un grupo de hermanos, familiares, amigos de los novios. Mientras caminamos hacia el municipio en donde se realizo el matrimonio civil un grupo musical tocaba himnos relacionados al matrimonio y de regreso al local de la iglesia.
Después de la ceremonia religiosa los esposos invitan a sus invitados a pasar al lugar de recepción para deleitarse con el banquete preparado por las hermanas de la iglesia y especiales de dos grupos musicales invitados por el esposo. Luego del banquete los invitados presentan sus regalos a los esposos y los esposos en agradecimiento entregan a cada invitado una botella de gaseosa y una bolsa de mana con dulces.
En toda esta actividad los testigos de los esposos siempre tienen que estar a su costado, aun cuando reciben sus regalos y felicitaciones. Los invitados portan sus regalos y junto con ello traen en una bolsita pica, pica para derramar en sus cabezas a los esposos y también a los testigos.
Es mi oración que esta nueva pare puedan glorificar a Dios en sus vidas guiando a sus tres hijos en los caminos de Dios. Que Dios les bendiga amados hermanos de la iglesia bautista “Alfa y Omega”
Cristóbal Churata Q.
Sirviendo al Maestro en Cusco
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